Decía Joseph Goebbels que «Una mentira dicha mil veces se convierte en verdad» y al parecer, el ex-ministro de propaganda del régimen nazi, no estaba tan equivocado pues, a pesar de vivir en la era de la información, pareciera que la mayoría de esta es falsa.
Estas últimas semanas han habido terribles lluvias e inundaciones en lugares donde, en otro tiempo, sería muy extraño ver dichos fenómenos como Alemania y Bélgica.
Y, a propósito del tema, en Twitter podemos encontrar muchos tweets sobre el tema, como el siguiente:
(acá una imagen de respaldo por si se «borra» el tweet)
Por si no alcanzan a distinguirlo, se muestra un vehículo en la inundación, obviamente inhabilitado, con una calcomanía con la leyenda «FUCK YOU GRETA!» y a menos que vivan debajo de una piedra, supongo sabrán quien es Greta Thunberg, la (ya no tan) pequeña activista por el medio ambiente que se volvió viral después de un video de reclamo a los políticos globales:
Y bueno, como sabrán yo apoyo totalmente la libertad de expresión. Si alguien quiere traer estampado en su carro un sticker de protesta contra el capitalismo o en apoyo a Trump, es su derecho. Cualquiera de los espectros políticos debería tener el mismo derecho, al menos en mi opinión, mientras no se vulneren derechos esenciales.
Pero ¿Qué pasa cuando, como en este caso, el agredido es un personaje o causa de un movimiento con una agenda política de un tema loable como el cuidado del planeta y el calentamiento global? Pues uno le desearía a este tipo de personas, como el conductor o dueño de ese vehículo, que la vida le diera lecciones duras sobre el tema, como en este caso, las lluvias fuera de temporada y en cantidades extraordinarias que, han sido relacionadas, obviamente con el calentamiento global, tema por el cual no solo Greta aboga, sino muchas otras voces, famosas y no tanto.
Karma le dicen, pues. Justo como en el Tweet original.
Todo parecería ser «justicia divina«.
Solo que, no lo es:
Resulta que, aparentemente, alguien tomó esta imagen original, de este artículo (en Alemán) de un sitio de noticias y la modificó a propósito.
Pronto la imagen se hizo «viral» y como era de esperarse, quien se identifica con la agenda política ecológica la «retweeteo» miles de veces, justo como nos decía Goebbels.
Pero eso no es lo grave del asunto; compartir información sin verificar ya se ha vuelto deporte, sobre todo en Twitter, pero, confirmar que es falsa, y aun así justificarla es una gran irresponsabilidad.
Al menos, más de una persona le indicó al autor de dicho «tweet» que esa imagen era falsa, con enlaces a la nota original, y aun así la respuesta de dicho autor fue la siguiente:
Sí, el «mensaje» sigue siendo certero, pero eso no justifica utilizar datos falsos, bajo ninguna circunstancia. Lo mejor que «Bobby» podría haber hecho es simplemente eliminar su tweet.
Y ¿Por qué es tan peligrosa esta tendencia?
Si, dije peligrosa. Tal cual. La principal es acusatoria. En este caso, nadie salió herido (o «cancelado«) pues no hay conductor a la vista ni placas del vehículo, pero ¿Se imaginan que pasaría si en la imagen apareciera el conductor? Desde «simples» agresiones en redes sociales, burlas hasta amenazas de muerte de aquellos simpatizantes más radicales, estoy seguro hubiera recibido esta persona sin tener ni la menor idea de lo que estaba pasando. Casos de «doxing» en acontecimientos similares ya han sido documentados.
Y la otra pero no menos importante: los hechos para apoyar, o mermar, en este caso una causa importante. ¿Que el cuidado del planeta y el calentamiento global son temas sumamente importantes? Claro que lo son, pero utilizar argumentos propagandísticos al grado de mentir, solo por apoyar una causa, cuan noble que esta sea, solo perjudica dicha agenda sociopolítica global. Porque, para convencer, pero más importante aún, tomar acciones, debemos contar con hechos fácticos y científicos.
Y esa, amigos, es la gran diferencia entre la ciencia y la política, la primera se basa en observación y hechos y está puesta al servicio de la humanidad, pero siempre, considerando los elementos naturales que están fuera de nuestras manos, con todas las consecuencias que eso significa. La política en cambio, en la práctica, es solo con conjunto de discursos, mayormente dirigidos a los intereses particulares de grupos o individuos.
Como le dice Morpheus a Neo en «The Matrix» al ofrecerle la pastilla azul y la roja:
«Remember, all I’m offering is the truth, nothing more»
Morpheus – The Matrix
Sin importar qué tan benéfica a nuestras creencias, ideologías y agenda política, siempre debemos buscar la verdad.
En estos tiempos de confrontación, fake news y falso activismo, más que nunca, debemos fortalecer los hechos y ser muy objetivos, pues, hasta está escrito en la biblia por los mismos discípulos que, de la boca del que muchos consideran hijo del el amo y señor del universo, Jesús de Nazareth:
La verdad os hará libres.
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